domingo, 21 de febrero de 2016

Vestir a un bebé de antesdeayer

Esto es un homenaje a todas las madres. A las madres de todos los tiempos, pero sobretodo, a las madres de antaño... Aquellas que lavaban la ropa a mano, las que ponían pañales de tela a sus hijos, las que utilizaban polvos de talco para el bebé, las que durante la "dulce espera" tejían patucos y abrigos a su futuro hijo, las que bordaban tocas y baberos a mano primorosamente, las que no sabían si sería niño o niña y sus vecinas y familiares les vaticinaban el sexo de su bebé por la forma de su vientre o con trucos supersticiosos de adivinación..., también un homenaje a mi propia madre, a mis abuelas...



He confeccionado una faja en recuerdo de las fajas que se utilizaban antiguamente para evitar que los niños se herniaran. Hoy en día están en desuso e incluso desaconsejadas por los médicos, pero hace más de 30 años su utilización era generalizada. El niño no debe llorar mucho para que no se hernie... era una frase común en esa época
.

Antes de que se comercializaran los bodys que existen en la actualidad en el mercado, que son de un tejido abrigado y cubren al niño la espalda y barriga sin riesgo a que se descubra, se utilizaban pequeñas camisas de fino algodón sujetas con cordón del mismo tejido o con un botón.





Las que hice para mi muñeca, he procurado  hacerlas lo mas parecidas posible a las de entonces, basándome en los recuerdos que tengo de ver vestir a mi hermano pequeño cuando yo contaba con 7 años y en las pocas imágenes que he podido recabar en interne. Es de entender que en una época en que los recursos eran escasos, y las familias tenían muchos hijos, las ropas de los bebés eran sumamente aprovechadas, con lo que no deben conservarse muchas prendas de este tipo. 



Se utilizaba una camisa sin mangas abotonada a la espalda. La mía la pulido con un zig-zag menudo alrededor, que me recuerda a una de las camisas que heredó mi hermano de mi. Sobre esa camisa se colocaba otra de manga larga que se abotonaba hacia adelante (si no me equivoco) para que el niño quedara bien cubierto por la espalda, aunque en interne las he visto abotonadas hacia detrás. Ante la duda, yo he hecho la mía hacia delante, no sea que le de frío a mi niña, jajaja.





La camisa de manga larga en lugar de hacerle el zigzag a máquina la he bordado a mano, que me parecía más bonito y entrañable. También le he bordado un pequeño dibujo en la parte del pecho.
Espero que te haya gustado este homenaje a las madres del ayer, y si tu misma lo viviste, haberte transportado un poquito al pasado y provocado una sonrisa en ti.
¡Besos, y hasta la próxima!